"La noche devastada" de Jean-Baptiste Del Amo, presa del horror

Casi todos tenemos la imagen de una casa embrujada en nuestras cabezas. Ya sea que creas en fantasmas o no, se sabe que ciertos lugares los albergan. Atemorizan, disuaden a los compradores y excitan a los cazadores. La ficción se ha nutrido de ella desde hace mucho tiempo, cada una con sus propias referencias. El fantasma de Canterville , de Oscar Wilde, dejó una marca sangrienta e indeleble en el suelo de la biblioteca de Canterville Chase y en la mente de una niña aterrorizada. Un regalo para los fans de las películas de John Carpenter o Wes Craven , criados en Halloween , El pueblo de los malditos , Scream o Pesadilla en Elm Street . Es especialmente